LA ESCALERA ESCULTURAL

Estudio Paolini Arquitectos

Director de Proyecto Arq. Manuel Pozzo

Fotos Arq. Gonzalo Viramonte

Texto Marina Aranda

Existen escaleras que conectan pisos y existen escaleras que funcionan como piezas esculturales, transformando una planta simple y despojada en un proyecto con carácter. La que estaba instalada en uno de los cuatro dúplex que conforman Vila Jardí – un desarrollo de ALIAT al sur de la ciudad de Córdoba claramente pertenecía al primer grupo, pero el arquitecto Francisco Paolini desarrolló junto a su equipo una estructura en madera con escalones en porcelanato que contiene una cava, un bar y un espacio de guardado.

Funciona como una pieza de transición entre la cocina y el comedor y encuadra éste con el bar. Integra el espacio de la planta baja convirtiéndolo en un todo”, explica el director de Paolini Arquitectos y CEO de Grupo Paolini. “Trabajamos la pieza como si fuera un plano de madera, ahuecándolo para crear las distintas secciones. La curva del bar se obtuvo superponiendo láminas de enchapado junto a costillas internas que actúan como estructura. Fue un trabajo minucioso”, agrega.

La sectorización visual de los espacios se logró asociando un material a cada área: enchapado en madera de laurel para la estructura, mármol verde bosque en la mesada del bar -iluminado con tiras led de baja intensidad-, vidrio reforzado en las puertas del lugar de guardado y paneles laqueados negros para revestir la heladera. El mismo recurso se utilizó para separar el mueble del living y el escritorio del hall en la planta alta, en ambos casos, un panel de listones de madera maciza pintados de blanco que media entre los espacios.

En cuanto al interiorismo, el estudio desarrolló los muebles en Buenos Aires y los trasladó a Córdoba en camión. “Priorizamos la armonía de proporciones, el organicismo y la funcionalidad proyectada, sin desatender los detalles ni la combinación de texturas”, sintetiza el autor del proyecto.

La cocina combina equipamiento revestido en placas lisas y ranuradas en madera de laurel con laqueado satinado en negro. Mesadas de neolith con terminación polished de mármoles Luvirma. Pisos de porcelanato instalados por ALIAT.

En la planta alta el varillado sectoriza el espacio y contiene los estantes del escritorio. Además, reviste la columna estructural y permite el ingreso de luz. Los espejos del baño son de Paolini Arquitectos. El respaldo de la cama está confeccionado con paneles entelados y listones de madera maciza. Lámparas Denver de Dimm.